viernes, 9 de enero de 2009





La nieve cae detrás de las ventanas,
mansamente, sin prisa,
sobre la tierra triste.
En vano busco restos de tus huellas
en ese manto, blanco y uniforme,
de lo que fue un camino.

La nieve cae para borrar el miedo,
la pena de los árboles desnudos,
la soledad corpórea de las ramas
vestidas de un noviazgo repentino.

La nieve va cayendo, perezosa
dispuesta a no dejar rastro del mundo,
a cubrir los senderos que conducen a casa,
y a esconder el deseo inoportuno.

La nieve va cayendo, suavemente,
envolviendo en su calma cuanto existe.
Ya no quedan rescoldos
de tus furiosas llamas,
y se apaga tu rabia, oscura y ciega,
dando paso a una brisa indiferente.

56 comentarios:

ybris dijo...

¿Qué tendrá la nieve que tanto cubre, tanto hermosea y tanto calma?
Resulta consolador y bello ver que con ella tus versos borran otras preocupaciones que empedran los caminos hacia casa.

Besos.

Marisa Peña dijo...

Yo también me lo pregunto. Es tan uniforme y perfecta en sus copos de cristal y nos adormece, al menos yo me siento así. Besos enormes

JR dijo...

envolviendo con frialdad otras calmas que pasan lejanas...
eres una excelente Poeta.
besos.

Marisa Peña dijo...

Muchas gracias por tus generosas palabras... El frío siempre envuelve pero nos queda la cálidas presencia de los que aquí se acercan. besos

Maria Luisa dijo...

Hoy tengo el día tristón.

Aquí también ha nevado un poco. Desde mi ventana veo el paisaje que tú describes y siento, añoro, sueño...

"En vano busco restos de (vuestras) huellas
en ese manto, blanco uniforme,
de lo que fue un camino"

Gracias Marisa por ayudarme " a borrar el miedo".

Un besazo.

Marisa Peña dijo...

Borrar el miedo es difícil pero debemos intentarlo. Que mi cálido abrazo llegué hasta ti y te acaricie el corazón y las heridas, mi queridísima amiga.

© José A. Socorro-Noray dijo...

Bellísimo, como siempre.

Cae la nieve
y, copo a copo,
va cubriendo las huellas
de mi alma.

Un beso

Marisa Peña dijo...

Querido amigo, siempre dejando palabras hermosas y generosas. Mil abrazos.

Borromín dijo...

Aquí también ha nevado... cerca, no en la costa al lado del mar, pero aún así veo, a lo lejos, montes nevados desde mi ventana.

Tal vez el blanco manto de la nieve no sólo borre las huellas sino los miedos y las penas, purificando y limpiando con su suavidad nuestras heridas.

Lástima que venga acompañado de tanto frio... algo malo tendría que tener.

Un fuerte abrazo.

Marina Casado dijo...

La verdad es que fue una grata sorpresa la nevada de ayer. No neveba así desde 1997...Y yo, que estaba debajo de la ventana, no lograba concentrarme en mis estudios...

Una poesía preciosa.

Un beso!

Marisa Peña dijo...

Borromín, la nieve nos une esta vez... el frío obliga al repliegue interior y , a veces es bienvenido, siempre y cuando haya donde refugiarse:)
Un enorme y cálido abrazo

Marisa Peña dijo...

¿Sabes Marina que esa nevada de 1997 yo fui madre por primera vez? Las nieves me trajeron a mi niña Irene, la de las manos blancas y los ojos enormes. Me quedé aislada en casa de mis padres con un bebé de tres días...Pero lo recuerdo como una experiencia maravillosa.
Estudia mucho y buena suerte.

Anónimo dijo...

"Jamás un copo de nieve cae donde no le corresponde", dice la sabiduría Zen.
Será por eso que relaja tanto, que nos calma tanto, que nos borra, como tu dices, esos miedos peleones...
Tan armoniosos como la nieve son tus versos de hoy.
Y por un momento me he imaginado las manos de tu hija Irene tan blancas como los copos, pero no por ello igual de frías.
Besos.

Elena Cardenal dijo...

Acabo de conocer tu blog, a través de la sonrisa de hiperión. Vaya, me ha gustado mucho, tiene muy buena pinta!!
Así que me seguiré pasando por aquí porque además parece que tenemos cosas en común!

Un saludo vecina!

Marisa Peña dijo...

¡Es cierto! Los copos caen con una sabiduría y una perfección impecables... la nieve nos recuerda que la naturaleza sabe cubrir la tierra y luego dejarla renacer. Un abrazo guapa.

Marisa Peña dijo...

Pues muchas gracias por venir y espero que sigamos descubriéndonos mutuamente. Bienvenida y hasta pronto...

José Luis Garrido Peña dijo...

Leyendo tu poema he recordado a R. Walser, esos pasos en la nieve en el bosque de los sueños y de la sangre.

Felicidades Marisa.

Marisa Peña dijo...

Maravillosa "La poética de invierno" de Robert Walser, "en verano no escribí nunca un poema". Siempre me fascinó la nieve con esa uniformidad y esa elegancia. Tus palabras tienen algo de eso también...
Gracias por venir querido amigo.

victor Rocco dijo...

LAS MUSAS CUANDO DUERMEN DESPIERTAN LAS LETRAS DE QUIENES LES ESCRIBE,"SUEÑO DE MUSA" MI ULTIMO POEMA, CHAO TE ESPERO.

Miguel Ángel Yusta. dijo...

Estos versos, Marisa,son como copos de nieve perfumados de ternura y sensibilidad. Querría ser envuelto por ellos, sentir la blancura, el silencio y el imperceptible sonido de las pisadas de alguien que, amorosamente,se acercase a tomarme en sus manos.
Y diluirme en ellas...

Marisa Peña dijo...

Gracias Victor, un cordial saludo.

Marisa Peña dijo...

M. Angel aquí entre mis versos siempre tendrás cobijo. Refugiémonos en las palabras, en la poesía y en la belleza. Un abrazo enorme que te abrigue el corazón.

PEPE dijo...

Vamos a mandar tus versos a ciertos políticos a ver si le cambia el ánimo con esto de la nevada.

A mí siempre me ha resultado curioso cómo la nieve, tan precisa y homogénea, genera ese impreciso borbotón de sensaciones.

Un fuerte abrazo y precioso Madrid bajo la nieve

Pepe

Isabel Mercadé dijo...

Qué suerte, Marisa, haber podido asistir a ese milagro desde casa. Sí, es como si la nieve, aunque fuera sólo un segundo, sólo uno de esos millones de copos (por cierto, ¿sabías que no hay dos iguales? aseguran los científicos), redimiera el mundo.
Mucho cariño.

Marisa Peña dijo...

Querida Bel, ayer miraba los copos y pensaba justamente eso que me dices:únicos y perfectos y juntos forman ese manto que aparenta ser igual...Ojala, como bien dices, redimiera el mundo y calmara los corazones airados y vengativos.
Tus palabras siempre llegan a mí como la nieve, dulcemente...
PD. He leído tu excelente artículo de manera fortuita, mientras leía un relato de una amiga. Me descargué la revista y allí estaban Clarice L. y vos...De nuevo llegaste "mágicamente" a mi vida, je, je)

Marisa Peña dijo...

Pepe, los políticos y la poesía...no sé. Un fuerte abrazo querido amigo.

Óscar Santos Payán dijo...

"La nieve cae para borrar el miedo" A veces un solo verso es suficiente. Este para mí ya sería un poema completo, cerrado, duro. Enhorabuena

Marisa Peña dijo...

Oscar,gracias por tus palabras. Las palabras pueden ser también como la nieve y borrar nuestros miedos...
A mí las tuyas me han traído uncálido temblor, la verdad.
Un abrazo

Isabel Mercadé dijo...

Vaya, ¡qué sorpresa! Gracias por tus palabras, Marisa. Me alegro de que te gustara. ¿Adivinaste que era yo la autora o lo sabías? Creía estar bastante bien camuflada entre las amapolas...¿Cuál es el cuento de tu amiga? Por cierto, yo he descubierto el de un amigo que tampoco sabía que iba a estar ahí. Se trata de "Caza menor". ¡qué bien! Sí, magia, como la nieve cayendo.
Un abracísimo.

Marisa Peña dijo...

No, no sabía que eras tú hasta que asocié el nombre y tus conocimientos de la escritora brasileña.Je, je. Sí que estás camuflada no creas.Te enviaré un correo y te contaré más despacio. Besos

Sergio Astorga dijo...

Marisa, como paradoja, la nieve calienta con su silencio las furiosas llamas.
Un abrazo calmo.
Sergio Astorga

Marisa Peña dijo...

Hermosa paradoja querido Sergio. Un fuerte abrazo

ESCRIBIENTE dijo...

¡Qué hermoso¡ ¡y qué manera tan intensa y tan precisa de conectar con el alma apaciguada y apaciguadora de este fenómeno meteorológico¡
Me encanta esa parte en la que ves la nieve en un pulso frente a la huella humana, a la que se impone y tapa...Precioso...

Luisa Arellano dijo...

La nieve tiene una belleza que supera lo que también tiene de terrorífica.

Yo también siento esa suavidad y ese adormecer que tanto necesitamos mucha veces.

Buen poema, marisa.

Besos calidos para contrarrestar el frío...

Marisa Peña dijo...

Me alegra que te hayas pasado también por mis versos...Y que te hayan gustado. Te enlazo para no perder tu huella entre la nieve.
Un abrazo

Marisa Peña dijo...

Queridas Luisa, me alegra que te guste el poema...Y que sigamos compartiendo. Recojo tus besos cálidos y tus generosas palabras. Abrazo enorme.

Navegante dijo...

Pedis que al pasar por aquí dejemos nuestra huella. Y dejo la mía esperando la veas antes de que siga nevando...
Encuentro en esta poesía algo contundente y bello aún dentro de la tristeza que encierra. Enorme capacidad descriptiva la tuya.
Te seguiré leyendo, besos argentinos pero de fuego, acá hace mucho calor...

JUAN JES dijo...

Marisa!

He visto en los periódicos,
la nevada en los muros Madrid,
de este lado del mundo va un abrazo,
suspendido en el aire,
como el humo.

Pasa un día por mi blog los ojos de tu espíritu.

Marisa Peña dijo...

Navegante, vi tu huella.Gracias por dejarla y perderte por aquí.

Marisa Peña dijo...

Juan Jes, muchas gracias por tu visita y tus palabras. Claro que pasaré por tu blog. Un abrazo

Guillermo dijo...

genial!!

Marisa Peña dijo...

Gracias Guillermo.Da gusto recibir tan cálida acogida en medio de este frío.
Un abrazo

MarianGardi dijo...

La nieve con su blancura nos hace recordar la pureza, no por su textura de frialdad.
Besos tiernitos como la nieve para ti preciosa

Marisa Peña dijo...

Gracias Marian, los recibo con mucha gratitud. Un fuerte abrazo

carmen jiménez dijo...

Ojalá la nieve pudiera borrar las huellas y comenzar un camino sobre la tierra desnuda recuerdos. Pero tras ella, tras su manto suave, queda el hielo en el que vuelves a resbalar.
Es que hoy estoy pesimista.
Un abrazo

Marisa Peña dijo...

Pues si resbalas, aquí estaremos para sostenerte o levantarte o caer contigo...No es fácil mantenerse firme en terrenos resbaladizos y menos cuando nos empujan...O nos caemos solos. Animo, que ya sabes dónde estoy para lo que haga falta. Un fuerte abrazo que te abrigue querida amiga.

PIZARR dijo...

Me encanta la nieve, no me importa que borre huellas o caminos. Me gusta tanto que seguro que los caminos que a mi me borra son aquellos que sabe no debo de seguir.

Mil gracias por tus palabras de ánimo Marisa.

Un beso

Fernando dijo...

la nieve es la esperanza o sólo una parte más del olvido?...cubrimos la vida con los sueños...efímera ella sabe que su blancura no ha de salvarnos aunque guarezca tanto silencio como el de una vida...ese mirar y sentirnos..eso me ha dejado tu poema..un beso.

Juanma dijo...

Ay, que no ha sido la nieve quien ha provocado este retraso para llegar a tu poema. Que ha sido un fin de semana fuera de casa; sin nieve, pero sí con perezas; dejándome llevar por la brisa de Lola, que nunca me es indiferente; sin miedos y encontrándome, al volver, con el manto blanco de tu poema.
Un beso (disculpas por el retraso).

Marisa Peña dijo...

Pizarr siempre tendrás mis palabras tanto aquí como en tu rincón. Tu voz amiga me llena de alegría y nunca, nunca, me deja indiferente. Un enorme abrazo

Marisa Peña dijo...

Fernando tal vez sea las dos cosas:esperanza y olvido... Gracias por tus bellas y palabras, poeta.

Marisa Peña dijo...

Juanma, que ya te iba a poner "falta"(je, je, es broma) Disfruta de Lola y cuídala mucho que ahora lo necesita. Mis poemas siempre estrán aquí y puedes venir cuando quieras. Cuando llegue la peque todo minuto os parecerá poco con los dos pero es tan maravilloso...Besos nevados

Marta Fernández Olivera dijo...

La nieve como bien dices, va tapando heridas, rabia, fuego...va tapando huellas de los que pasaron y vivieron, borrando senderos que conducian al desastre, cubriendo tejados de hogares enegrecidos por el mal paso del tiempo, la nieve blanca y fria que tambien arranca vidas del los huespedes de parques y cajeros es la misma nieve que nos invita al reposo, la melancolia y el disfrute.
Precioso Marisa
Besicos

Marisa Peña dijo...

¡Qué hermosa reflexión Marta! Da gusto tenerte entre mis versos. Un abrazo enorme, enorme...

Elena Cardenal dijo...

Veo que la nieve inspira para escribir. Será porque se deja ver poco.
Tienes un bonito blog, como la nieve!

besos!

Marisa Peña dijo...

Gracias , es un estímulo recibir comentarios como el tuyo, la verdad.Un abrazo

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