domingo, 9 de mayo de 2010

Yo fui sombra del mar, luz de poniente,
carnaza de las aves de rapiña,
corazón exiliado de su cuerpo.
Humo de madrugada, oscuro vientre.

Y me dejé llevar por la corriente,
las olas me arrastraron a tus playas...
Ahora duermo en la eterna madrugada,
el sueño, blanco y largo, de la muerte.

20 comentarios:

Angeles Fernangómez dijo...

Cuando lo leí por primera vez, me pareció que hablaba una puesta de sol.
Lo releí y percibí muchas interpretaciones, pero siempre con final de muerte.
Es que un corazón exiliado del cuarpo no puede latir por mucho tiempo.
Besos, linda poeta.

Anónimo dijo...

Un poema desesperanzado, de sombras, de luces de poniente, de exilio. Un poema triste e íntimo que duele y emociona, pero sobre todo un grandísimo poema.
Un saludo y mi admiración.

FLACA dijo...

Cada verso llega como un golpe helado que duele.¡Cuanto dolor y cuánta muerte!...Todas las imágenes de la primera estrofa la sugieren y nos van llevando al último verso del poema.
Precioso, como siempre. Y triste.

Elchiado dijo...

Pues, yo también lo he leído varias veces. Todo me parecería desesperanza, si no fuese por hablar de la muerte como un sueño, por pintarlo blanco, por hallar destino en una playa... No sé... son interpretaciones, pero igual hay una paz deseada en ese final magistral del poema.
Un beso.

ralero dijo...

Joder, Marisa, cómo andamos últimamente. Habrá que buscar algo para animarse. Aunque sea debajo de las piedras.

Un beso.

siempreconhistorias dijo...

Venga, Marisa vital, vamos que es primavera, mi blog se fue al carajo por un error, no tengo dónde vaciar pero leo, te leo y te doy, siempre, el abrazo que requiero.
Eres magnífica poeta. Te admiro profundamente. Te sonrío. Siempre y sin historias pero con historia te quiero.
Un beso fuerte, y todo el ánimo.
Izaskun

© José A. Socorro-Noray dijo...

Es un poema que duele, desgarra el alma, pero deja al final un regusto dulce.


No, Marisa,
tú no eres sombra.
Tú eres faro.




Un beso

Laura Gómez Recas dijo...

Es diáfano el lenguaje en este poema, Marisa. Es un poema grande, lleno de sentimiento y de poesía de la buena. Ese sueño blanco y largo... de una muerte que se vive es impresionante.

Da gusto leer poesía como esta.

Un beso.
Laura

ALE. dijo...

Casi desgarra, pero a la vez es tan bello Marisa, tan bello...

JAUD dijo...

Marisa, es un poema trsitisimo, haberse entregado, y haberlo dado todo para ya no vivir ni en el recuerdo. Como siempre tu belleza literaria aún en el verso triste. Un beso grande

ybris dijo...

Como música hoy tus endecasílabos sobre el ritmo del asonante e_e acompañado de la impactante t.
Y como música creo que debe tomarse lo que dices. Seguro que tú no estás ahí más que como la directora de la orquesta convocando la tristeza de una existencia que, sobre ser profundamente vida, vive bajo el peso (o la liberación) de ese "sueño, blando y largo, de la muerte".
Precioso, Marisa.

Un beso.

Santa dijo...

En ciertas playas de Galicia ondea la bandera roja: 'Peligro de muerte: fuerte resaca'

Entro de golpe; dejo que la corriente arrastre mi corazón mar adentro.
A veces, el oleaje consigue que vuelva a latir...

Jose Zúñiga dijo...

Sugerente poema, cuidados endecasílabos, morir en otro.

Luisa Arellano dijo...

Es este poema tristísimo nos dejas navegar nuestras propias emociones para reconocernos vencidos o victoriosos... porque la muerte también puede significar dejar atrás y encontar la calma ansiada.

Profundo y doloroso, pero sobre todo bello bellísimo.

Un beso muy grande, poeta.

Fernando García Pañeda dijo...

engullido por ese oscuro vientre
absolutamente

Jesús Arroyo dijo...

Marisa:
¿Qué tendrá el 11?
Dos números iguales para acompasar un verso y otro verso. Suene a muerte o llame a vida.
¡Bien!
Besazos.

Lunska Nicori:BegoñaGTreviño dijo...

Si leyera esto la madre de un inmigrante que viajó en cayuco y nunca más se supo de él... pensaría que este poema lo escribió su hijo...

Al margen de esta visión terrible que me ha venido a la mente..., siempre me dejas con un escalofrío...
Abrazos y besos

Rafa Martín y Maria J. de la Vega dijo...

Jópe, Marisa. Y es precioso. Precioso.

Anónimo dijo...

Como la lengua a una muela hueca, la muerte gusta de pasearse por este lado de la vida.

Nube de talco.

Un beso.
(Es un poema triste, pero muy bello y elaborado)

Marisa Peña dijo...

Cuando escribí este poema no pensaba en nada en concreto. Una imagen del mar, una sensación de derrota y decepción, un cansancio, una noticia de muerte...las palabras fueron llegando a mí, como ramos de cerezas, engarzadas, aunadas, decididas.a medida que leía vuestros comentarios,el poema iba tomando diferentes significados, nuevas perspectivas, y dejaba de ser mío.
gracias por enriquecer lo que escribo, por ayudarme a ser mejor, por acompañar mi escritura. Angeles, luis, flaca, elchiado, éxodo, izaskun, Noray, laura, Ale, jaud, ybris, sanya, jose, luisa, Fernando, jesús, begoña, maría, pepe... gracias desde lo más profundo de mi corazón.

También puedes leer

Related Posts with Thumbnails