Yo recojo la pena de la lluvia...
No quiero que el desánimo me invada,
pero es difícil ir contracorriente.
Y me dejo llevar por la tristeza.
Es sencillo:
me abandono,
me diluyo,
me hundo,
me acurruco en sus brazos,
me aproximo a su abismo
y espero su llamada.
Un profundo silencio
va inundándolo todo.
Se borran las fronteras,
y los difusos trazos de mi rostro.
Nada me queda ya. Todo es oscuro.
Nadie sigue mis huellas,
y nadie ha de llorar este dolor,
esta gris oquedad de mis fronteras
que es sólamente mía, y me reclama...
58 comentarios:
Querida Marisa, siempre paso por aquí y siempre me quedé deslumbrada.
Por no saber expresarme como tu, es que no te dejo comentario.
Pero hoy quiero que sepas que tienes una hermosa manera para expresar lo que todos hemos sentido miles de veces.
Con este poema me sentí totalmente identificada y quiero que lo sepas.
Yo jamás lo hubiera podido expresar así.
Ahí van mis felicitaciones, mujer!!!
Si no aparezco, quiero que sepas que continúo y continuaré leyéndote siempre, aunque no recibas comentarios, por supuesto y no me cabe ninguna duda, siempre excelentes como tu.
Me hundo...yo tambien hundo mis ojos en tus versos, que bellos son, se dejan besar, mas que leer.
Un Abrazo.
Me dejas con la boca abierta, Marisa. Me calan tus versos y tu tristeza, esa que te llama y que por medio de tu poema hago mía.
Un beso.
permiteme que me sonría...acabo de escribir esto....
Recorro la distancia y soy del relámpago la última palabra,
quizás la que preludia la llegada del fuego
o ese silencio apretado en los segundos
que siempre trae el trueno.
Acaso la lluvia es diferente cuando mansa pastorea en el otoño
y se hace cicatriz de gruta en la roca gris del invierno,
o nieve hermética circundándolo todo.
Pero esa no es la lluvia que yo nombro,
esa no tiene los tambores,
ni el grueso de las nubes descarrilan
en un esfuerzo recio y ponderado del tren de la tormenta.
Gotas de llamada que florecen transparentes y alumbran las aceras,
se hacen flores en el campo
y llenan de charcos y mundos habitables todos los caminos…
Esa sí, esa si es mi lluvia y mi tormenta.
un beso...mojado.
f.
Yo también continúo leyéndote. Leyendo y admirando cada renglón que escribes. Estoy bien. Descanso.
Un beso.
(como no tengo tu correo, te dejo aquí este enlace que me han enviado. Es de una mani que hubo en Barcelona para protestar sobre el plan Bolonia.
http://e.static.blip.tv/cache/1891138/
¿Alguien se cree todavía que estamos en un estado de derecho?
Qué lástima.
Como siempre. Una orfebrería perfecta lo tuyo.Unidad total de música y sentido. Dicen, no sé si es cierto, que Mallarmé le dijo a Degas: "la poesía no se hace con ideas, se hace con palabras". Tú eso pareces tenerlo más claro que nadie.
Cierto marisa, nadar contra corriente es difícil, pero es la dirección que hemos elegido, echarse a la corriente es más fácil pero ¿adónde seríamos arrastrados?
"Caminante son tus huellas el camino y nada más...", importa dejar la marca, y cada uno las suyas.
Leí en la otra entrada que decías que estabas un poco pachucha, te deseo pronto restablecimiento.
Besos.
Querida Marisa, hago mías cada una de las palabras de nuestra querida amiga Bel. Durante todo este tiempo yo también he pasado casi furtivamente por este grato refugio, a veces sin palabras, y otras veces como quien se permite un fugaz descanso de sí mismo, para recobrar fuerzas y seguir.
Tus palabras siempre traducen la tristeza en un bello sentimiento humano, que se vuelve melodía de imágenes brillantes y sentidas, y nos envuelve y abriga a todos en su humanidad. No es fácil lograrlo, y en tí, fluye con talento y brillo singular. Gracias por esa maravillosa sensibilidad que nos regalas cada vez.
Si algo grato me queda de esta ausencia, es tener más de tí para leer en estos días en que retorno de mi propia historia, quizás algo golpeado, pero en el estado ideal para recostarme en esta belleza que sé que siempre me espera, cuando regreso cansado y sediento, a beber de tus hermosas palabras. Te celebro como se celebra la magia de ver los sentimientos conocidos con ojos nuevos, a través de tu mirada. Te mando un gran abrazo, al abrigo de tu poesía cálida y humana.
Marisa, tienes grises oquedades como frontera, y son tuyas,sólo tuyas,como tus palabras, y también lectores que descansan y descalabran en tus angustias.
Un abrazo que no se diluya.
Sergio Astorga
Hasta esta pena recogida de la lluvia, hasta esa oscuridad, hasta ese reclamo... suena con hermosa belleza en tu poema.
Besos Marisa
Será sólo tuya, Marisa. Pero por el verso, ya es de todos. Abrazos.
Es "sencillo" dejarse llevar por la tristeza, cuando el gris de los días cae como una manta.
Quien tuviera, tu sensibilidad, tu capacidad para decir las cosas como tú las dices.
Un fuerte abrazo, mi querida amiga.
"Nadie sigue mis huellas..." sé que es un verso tuyo, una metáfora pero debes saber que sí las seguimos, seguimos la fuerte huella de tus palabras que dejan rastro en tu camino y en el nuestro.
Un beso.
Bea: me emociona tanto lo que me dices... Ahora soy yo la que se queda sin palabras.Siento tu afecto cálido y hermoso y lo llevo siempre en mi corazón. Gracias por estar ahí. Un abrazo muy muy grande.
Edu, tu presencia es siempre una alegría para mí. Gracias por todo
Luisa...La poesía es un lugar de encuentro, tanto en la alegría como en la tristeza.Un abrazo enorme mi querida amiga y poeta.
Fernando tus versos son lluvia en mi casa y en mi corazón. Gracias por todo poeta.
Pepe, el cansancio siempre vence en las almas nobles que, como dijo baroja en una de sus novelas, "tiritan de frío". Sé que estás. Te dejo mi correo por si quieres escribirme
marisadelapf@yahoo.es.
Un abrazo muy grande
Ay Santiago que cosas me dices...Hasta la tristeza huye cuando lee tus palabras. Un beso muy fuerte querido amigo.
Impersonem, mil gracias. Lo mío es crónico: va y viene. Convivo con ello y acepto mi mala salud de hierro como buenamente puedo. Tus palabras son un una alegría para mí. Un fuerte abrazo.
Goliardo, qué alegría que hayas vuelto y que me visites...Tus palabras me envuelven y me embriagan. Gracias, gracias, gracias...
Amigo Sergio la tristeza compartida es menos tristeza...Besos
María, dicho por ti hasta parece cierto...Te mando un fuerte abrazo querida mía.
Antonio muchas gracias.La poesía es lo que tiene... Conjura el dolor con la fuerza de la palabra y nos permite compartir.Un fortísimo abrazo.
Exquisito, en un tiempo en el que parece que las nostalgias se adueñan del paso y acampan entre nosotros.. un saludo
Todos nos hemos sentido fundidos con ese dolor que nos reclama, de ahí que este poema, sea universal...
Un abrazo
MArian
Borromín, la sensibilidad está muy denostada, y a veces me gustaría no tenerla para no sentir la pna de l alluvia...Un beso querido amigo
Carmen, no sabes cómo te agradezco tus gestos de afecto y tus palabras de ánimo...a veces es inevitable el naufragio.Un beso guapa
Muchas gracias Beker y bienvenido.
Marian la tristeza nos reclama y a algunos más veces de las que quisiéramos...un beso, poeta
...Pues sí, amiga mía...estamos buenos!
Besos
Pasará la tristeza, lo sé. Estoy acostumbrada a sentir la tormenta y dejarla pasar. cuesta recomponerse pero al final se hace, mal que bien. Besos
Llegó la lluvia y renaciste.
Tus versos de lluvia, tu palabra de espera, tu llamada...
Y, después de las lágrimas, la luz del reencuentro.
Te queda toda una vida para caminar con "él"...
Besos.......
Hasta la más profunda tristeza tiene su costado hermoso, como tu poema.
Abrazo fuerte (¿te serana el mar?)
Besos de tu amigo REL
Querida Marisa poeta:
en cualquier oquedad de tus fronteras quisiera yo cobijarme y hacerte alguna cosquillita mientras te recuperas.
Eres muy muy buena.
Besitos-azos-osos.
La lluvia es más que pena.
Si la vemos sólo desde el lado de la tristeza no es extraño que nos invada el desánimo, el abandono, el silencio forzado y la gris oquedad que nos reclama.
Pero luego los versos -y la cantata de Bach de fondo- suenan con un brillo de esperanza.
Besos.
Mi querido Miguel Ángel, amigo del alma y la palabra. Yo lucho contra mi tristeza y procuro ser más fuerte. La poesía me salva del abismo y conjuro el dolor con las palabras. Un beso emocionado.
REL, el mar me serena, y vuestra compañía, y la poesía...Pero a veces vencen los fantasmas.Un beso,poeta.
Izaskun eres estupenda, y tupalabra amiga un lujo para mí. Gracias ,corazón.
Ybris me debato entre el deseo de esperanza, las ganas de creer y cierta incredulidad inevitable. ."El sol sólo es el sol si brilla en ti, la lluvia es sólo lluvia si te moja al caer..." Serrat dixit. Un beso amigo
Tristeza del alma, íntima y maravillosamente escrita; ojalá fuera un sentimiento igualmente hermoso.
Un caluroso abrazo.
gracias Emilio.Ojalá la emoción que da lugar al poema fuera sólo un juego de ficción literaria...besos
recoje la pena de la lluvia... llena la bañera y date un delicioso y sosegado baño... y cuando se te arruguen las mollitas de los dedos... tira fuerte del tapón...
Así haré...Bienvenida
Dulce Marisa:
" No quiero que el desánimo me invada,
pero es difícil ir a contracorriente.
Precioso, sentido, dolorido.
Dices en tu bello poema:
"Nada me queda ya,
nadie sigue mis huellas"
Marisa todos seguimos y seguiremos tus huellas convertidas en bellas palabras.
Te quiero.
Ay mi Maria Luisa...Qué difícil es a veces lo más sencillo. Tú sí que eres dulce y buena y tenerte cerca es para mí un regalo que sé que alguien sabe que me hace falta. Besos preciosa.
Bueno, este corazoncito acusó recibo directo de este precioso poema.
Hasta allí llegaste, muy certera Marisa. Acaso porque sabés y muy bien, decodificar los sonidos de la tristeza en una mujer.
Gracias mi bella Amiga!
Te abrazo!
Sólo un hola, una felicitación más y un abrazo.
Es muy difícil, con mucho, mucho empeño, se puede conseguir, aunque a veces la corriente es más fuerte que una misma.
Hoy siento tu poema muy dentro de mí.
No sábes cómo te agradezco tu poema, lo tendré siempre presente en mi blog, y en mi corazón.
Un beso, Marisa.
Susana un fortísimo abrazo, poco a poco voy recuperando mis fuerzas pero estoy algo "flojilla" todavía. Un beso corazón.
Soco guapa otro abrazo enorme para ti...
Irene eres un sol...te mereces sentirte querida y apreciada. Un beso
No vengo a devolverte la visita sin más, Marisa, vengo dispuesta a quedarme instalada en tus palabras, para fijar tus huellas al suelo y que nada las borre.
Un abrazo.
Gloria mil gracias. Viniendo de las amapolas estoy segura de que tenemos mucho que compartir. Un beso.
Sigo leyendo...
Pues estás en tu casa, ya lo sabes...
Que tristeza tan gris Marisa, todos en algun momento hemos sentido exactamente o casi estas sensaciones, como si te dejaras llevar por el desagüe hacia las mas profundas cañerias del abismo solitario y oscuro, frio y gelido..uffff, qué repelús "ma dao"
Besos
Tus letras no me son suficientes para leerlas en la pantalla. Necesario tenerlas impresas. Debo apurarme con tu libro.
Mi admiración para tí.
Publicar un comentario